NUTRISANA EDUCACION COLABORA EN MALAGA CON UNA COMISION DE EXPERTOS EUROPEOS

The act of eating has not only a physiological function, is also an act full of symbolism. Humans, marked by their culture, select foods as edible and inedible. What is edible in a country, such as a dog in our country is not as it is treated as «partner and friend.»
When we introduce a food in our mouths, we begin the physiological process of nutrition, but in parallel we implement other, equally complex, psychological, ecological, cultural and social. In all peoples and cultures, food choices and diet are often conditioned by a religious prohibitions, considering what is good or bad for the soul and health (Contreras). A certain foods have been given a strong symbolic, according to certain attributes.
I want to focus today on the conditioning ideological, religious, typical of our culture, with strong Christian base, in which certain behaviors are considered sinful or the way to holiness, in the case of fasting. Still, the Christian religion is not the most severe compared with the Hindu, Mohammedan or Jewish.
It is the season of Lent when advised not to eat meat, food loaded with pleasure, and replace it with fish. It was a way to strengthen the spirit, the soul, by Faith. Today we live in a society opulent and rich in foods. Now a days we do not live Lent as 20 years ago, the ideological cultural conditions are changing.
The price of fish is more expensive than meat, but still, at this time we turn to typical Easter meals, many of them with vegetables and fish. Before, the price of cod was very cheap, so we can find it in: salad Malaga, in omelettes, fritters, soldiers of Pavia, ajocolorao in ratatouille, … and the Easter Vigil potage.
Other fish are used to make marinades, also prepared “in yellow”, with almond sauce. Legumes are used with spinaches, pumpkin, potatoes, noodles. Mushrooms, asparagus, aubergines… and with cod.
The desserts (need a good walk to burn off the calories we provide): the torrijas, buñuelos, pestiños, fried milk (with nougat iced from Casa Mira), Easter donuts, hornazo…
We must reflect on our rich cuisine and culture, and enjoy these meals in Malaga, during Holy Week.
Fotos:
Ajoblanco malagueño by Diana Cabrera, Canal Cocina.
Albóndigas: http://www.hojiblanca.com/1305/albondigas-de-bacalao/
Potaje de bacalao by Koldo Royo, Canal Cocina.
Porra antequerana by Sergio Fernandez, Canal Cocina
Esto es consecuencia de la alteración en la acción de la hormona insulina, que se encuentra en estos pacientes en menor cantidad o desaparece totalmente. Sin insulina, hormona que actúa a modo de «llave» para que entre en la célula la glucosa, nuestro cuerpo no puede regular de forma autónoma las cifras de glucemia, apareciendo una serie de manifestaciones clínicas que nos alertan de la enfermedad y, lo que es peor, de complicaciones a corto-medio plazo si no se trata, pues nuestro cuerpo necesita usar y metabolizar esta glucosa, lo cual no es posible sin la insulina.
Una de las claves básicas en el tratamiento y control de la Diabetes Mellitus es el manejo dietético-nutricional. El diabético ha de conocer qué comer, cuándo, cuánto, cómo… Es un proceso crónico de modo que ha de interiorizarse para llegar a ser plenamente autónomo e independiente.
Las comidas que antes se realizaban en el seno de la familia, hoy en día se llevan a cabo en lugares de trabajo, colegios y fuera de casa en general, no existiendo control sobre la ingesta que realizan niños y adolescentes.
Se proponen distintas estrategias:
1. Expresión de sentimientos negativos: En el ámbito familiar y social. Debe ser una comunicación donde la expresión de sentimientos negativos no provoque el rechazo ni deteriore las relaciones familiares e interpersonales. Donde se omita la crítica destructiva, y la carga de intencionalidad.
2. Fortalecimiento de la autoestima: Es conveniente adiestrar a los padres en el fortalecimiento de la autoestima de sus hijos, en la medida en que la baja autoestima es un factor de riesgo para el desarrollo de TCA, tratando de magnificar el alcance de pequeñas o grandes metas, y de minimizar los errores o fracasos.
3. Escucha activa: Fomentar la escucha y la tolerancia, haciéndolas compatibles con normas educativas consistentes, sin hacer Hincapié únicamente en lo negativo, con normas coercitivas y punitivas. Hay que prestar atención a las situaciones de estrés, problemas que no se han podido afrontar, conflictos en la familia, un fracaso amoroso o un incidente con los compañeros, ya que es posible que piensen que esto no habría ocurrido si su cuerpo fuera de otro modo.
4. Apoyo familiar: Si el adolescente se siente apoyado por sus padres y tiene asertividad suficiente, solucionará con más éxito los problemas que le surjan durante su socialización. Los miedos de origen evolutivo entre los que se encontraría el miedo al rechazo social aparecen al inicio de la adolescencia, pudiendo ser consecuencia de un aspecto físico que no se ajusta al ideal. Estos miedos se atenúan si se cuenta con un ambiente familiar atento a las necesidades de los hijos, positivo, que proporcione seguridad, consejo y apoyo sin caer en la sobreprotección.
5. Mayor implicación en la educación alimentaria: Se propone una mayor implicación de los padres en el control/educación alimentaria. Para ello es recomendable que al menos se efectúe una comida al día en familia intentando que la experiencia sea agradablemente percibida por los hijos, mediante la creación de un clima distendido y cordial.
6. Factores de vulnerabilidad: Los padres tienen que ser conocedores de los factores de vulnerabilidad de los trastornos alimentarios. De esta forma serán capaces de adelantarse informando a sus hijos sobre la naturaleza y los peligros de los prejuicios contra las diferentes constituciones corporales, informando sobre lo inadecuado de los mensajes críticos para con la obesidad emitidos por los medios de comunicación. Es fundamental evitar la colaboración con este tipo de mensajes, no propiciando la adopción de dietas salvo prescripción del médico o del dietista-nutricionista, y bajo el seguimiento por parte de estos profesionales. Además hay que decir que a los adolescentes no se les suele poner a dieta para adelgazar, si es necesario se les educa mediante recomendaciones sobre alimentación saludable, dada la peligrosidad de realizarlas en esta edad.
Nutrisana son profesionales sanitarios acreditados por la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía como Centro Sanitario de Asistencia con Consulta de Dietista-Nutricionista y Consulta Médica de Endocrinología y de Nutrición.
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